domingo, noviembre 29

La noche es magnífica esplendorosa todo se libera en las noches
Las luces brillan en la noche de día no brilla nada, todo está apagado de día, de día nada se enciende de día no se vacían las mentes no se abre el torbellino en la noche todo explota todo brota todo florece todo nace y muere en la noche.

miércoles, noviembre 25

“El que lucha con monstruos hará bien en ser prudente, no vaya a convertirse él mismo en monstruo. Si miras un abismo durante mucho tiempo, también el abismo te estará viendo por dentro”

-Nietzche

lunes, noviembre 23

Si dejas correr tu conciencia la realidad se ahoga lentamente si dejas que corrar se expande y flota si la retienes se pudre y mal-huele horrible apesta nauseabundo si no la dejas correr se te pudren las ideas corazón deja que fluya que las noches se lo llevan todo todo se borra en la noche todo se mueve en la quietud todo se va.

viernes, noviembre 20

Hoy, yo, Victoria, declaro ante todo el que lea esta basura que estoy decidida a dejar de ser una pusilánime.

domingo, noviembre 15

Cuando caiga será de un lugar muy alto, para sentir que vuelo. Que vuelo muy alto.

domingo, noviembre 1

Disaster

Soy un desastre, mi hermana suele decírmelo medio en serio, medio en broma, pero es cierto. Soy un total, completo y absoluto desastre y sé qué lo soy porque me importa una mierda.
Si me imagino viviendo sola en el futuro es con un clóset bien añejo lleno de ropita medio de niña medio de mujer, ropitas escogidas porque soy vanidosa, vestidos bonitos que me quedan bien. Me imagino en un departamento chiquitito y antiguo, de esos con terraza con Art Nouveau (o como se diga), me imagino en la terraza de noche, con mi pijama, tan sólo una polera liviana y un short corto, con el pelo suelto y un cigarrillo en la boca (aunque justo ahora, no fumo) una taza de café en el piso al lado de mi notebook, mirando la noche (que tanto me gusta), la luna y suspirando por algo que no sé que es. Me imagino bajando la mirada y saludando a alguien (un vecino o quizás tú) y luego sentándome en la cerámica helada, a perder el tiempo, como tantos otros días, hasta que el cigarrillo se consuma, se acabe el café o me aburra nada más.
Me imagino la habitación llena de ropas tiradas por todos lados, algunas mías, otras no, me imagino lo zapatitos esparcidos por todos lados, me imagino las plantas extrañamente bien cuidadas, me imagino el living con alfombra mullida esperando tal vez conciliar el sueño en ella. Me imagino la mesa del comedor, llena de papeles, de diarios, de tazas de capuccino, de colillas de cigarrillo. Me imagino el baño, limpísimo por mi complejo anti bacteriano al igual que todo el departamento (limpio, pero desordenada). Imagino también la mañana, despertándome tarde porque mi casa casi no tendrá relojes, arreglándome apurada y buscando las llaves desesperada para salir corriendo, dejando el desastre de cosas tiradas por mi camino, agarrando un poco de dinero para comprarme algo de desayuno en la panadería de la esquina para comer de camino a donde-sea-que-vaya. Me imagino tomando el transporte (o quizás manejando) hacia ese lugar, olvidando que dejé la llave abierta del baño, que me traje el bolso equivocado, que dejé las llaves en la mesa de la cocina. E imagino mi cara de sorpresa, cuando me de cuenta de todo y me imagino diciendo ’soy un desastre’ mientras me devuelvo para solucionarlo, entre risas, porque ser un desastre es muy divertido.

Fuck you, Salinger!
@postsecret