miércoles, junio 3

El bienhechor

(...) Y cuando hubo salido de la ciudad, vio a un joven que lloraba sentado en el borde del camino.
Y se acercó a él y le tocó los largos bucles del cabello y le dijo:
-¿Por qué lloras?

Y alzó el joven la mirada y le reconoció y respondió:

-Estaba muerto y me resucitaste de entre los muertos. ¿Qué otra cosa iba a hacer más que llorar?

-Oscar Wilde

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cabrón.


Saludos Victoria...